Cuando Nigella Lawson salió del agua despertó la curiosidad de los bañistas que se encontraban en la playa de Boni en Sídney. Lo que lleva puesto es un burkini: un traje de baño musulmán que solo deja al descubierto parte de la cara, las manos y los pies. Lo curioso es la fuerte demanda que está teniendo este tipo de prenda.
Según fuentes recogidas por Daily Mail,las mujeres británicas no musulmanas apuestan por esta moda: el burkini o bien para protegerse del sol u ocultar algún kilito que con el bikini supone una ardua tarea tapar. Nigella Lawson es una de las mujeres que ya usan este tipo de prendas cuando pisan la arena. Ismail Sacranie, director de ventas y marketing detalla que: "Los primeros años han sido una lucha dura, pero, en los últimos dos años las ventas han crecido entre un 30% y un 40% por ciento en Inglaterra." Un boom que está teniendo bastante tirón entre las mujeres desde que arrancó en el año 2007.
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